
Si vas a un colegio y le preguntas a los niños del mismo qué quieren ser de mayores, la respuesta en la mayoría es obvia: futbolistas. Este objetivo solo lo llega a cumplir una parte muy mínima de ellos. Pero, ¿todos es por falta de habilidad? Muchos factores influyen en este hecho. Lo que está claro es que es un proceso muy largo, y cada chico va teniendo distintas sensaciones.
Siempre existe un momento en que estos chicos se dan cuenta de que su vida ha cambiado. Es interesante poder ver este momento según la perspectiva de diferentes personas que estan relacionadas con ello: Un futbolista que está rozando el éxito...uno que desgraciadamente no llegó a ello... un entrenador de niños que pueden llegar a tener el potencial necesario para lograrlo...un psicológo capaz de analizar el comportamiento de estos muchachos…jugadores que denuncian la desigualdad que existe...
Son muchos los puntos de vista distintos que se pueden encontrar.
Sergi Samper es jugador del FC Barcelona B. Está considerado una de las mayores promesas de España, e incluso del mundo. Criado en La Masía, Samper es un chico totalmente indicado para mostrar sus inquietudes sobre este tema. La importancia que le dá a la familia en este proceso es enorme, pues como bien indica son muchos los compañeros que se quedan por el camino. Su familia siempre le ha mantenido los pies en el suelo y le ha guiado por el camino correcto. Considera que su punto de inflexión llegó con su debut en partido oficial con el primer equipo del Barcelona, ni más ni menos que en un partido de Champions League. En ese momento la gente empezó a conocerle, y ya no es raro ver a gente por la calle pidiéndole una fotografía.
José Kanté está jugando ahora mismo en el AEK Larnaca de la primera división de Chipre. No ha tenido un camino fácil, pues tras llegar al Málaga B (momento con el que empezó a pensar que podía llegar a ser profesional) denuncia que su entrenador era racista. Esto le hizo abandonar el club malacitano y a buscar una oportunidad fuera de España. Resalta que el dinero también es un factor que influye en la búsqueda de un buen equipo cuando se empieza a jugar.
David Aroca es portero del Real Zaragoza B. Destaca a su familia como el apoyo que está siempre, tanto en los malos como en los buenos momentos. Cree que los representantes son claves porque hay cosas que a los jugadores se les escapan, y ellos han recibido una formación para solucionarlo. Su vida cambió cuando a los 16 años empieza a vivir solo al trasladarse a Zaragoza para intentar cumplir su sueño: ser futbolista.
Pau Roca es exjugador del Terrassa. Lo dejó porque llegó a la conclusión de que hay un momento que se necesita una gran implicación y es complicado compaginar el fútbol con los estudios. Este hecho le hizo de cambiar y prefirió dedicarse plenamente a los estudios. Cree que tenía posibilidades para llegar a un nivel medio-alto peró que para triunfar hay dos opciones: ser muy bueno o tener un buen representante. Hace hincapié en lo del representante porque algunos excompañeros (que en teoría eran peores que él) han conseguido buenos contratos por tener representante.
Joel Caballero es entrenador de niños de 8 a 10 años en el Sant Pol. Ha podido comprovar de primera mano como alguno de sus chavales es llamado por un equipo grande como el FC Barcelona o el Espanyol. Nos cuenta que sus jugadores entrenan mucho mejor y con muchas más ganas cuando se ven pretendidos por un equipo como estos. Joel, nos deja claro que con esta edad lo más importante es disfrutar y que cuando sean mayores ya se darán cuenta de si quieren seguir o prefieren centrarse en otras cosas.
Pol Roca es estudiante de psicología. Dice que ningún niño o joven está preparado para un cambio tan grande. Será su entorno el que defina la presión que puede sostentar . Son edades frágiles en las que la educación es muy importante, y se necesita un guía. La familia normalmente es ese sustento. Los aspectos profesionales y personales se complementan el uno al otro y lo que afecta a uno afecta al otro. Nos pone ejemplos fáciles para entederlo como el caso de Mario Balotelli o los casos de Messi e Iniesta.
La mirada que hace cada uno es muy interesante. Todos ellos tienen su propia historia y han tenido suficientes experiencias como para poder dar opiniones razonadas sobre este tema. Coinciden en el papel tan importante que tiene la familia en estos chicos. Podríamos decir que el éxito también es en parte gracias a ellos, por saber aconsejar y ayudar en todos los momentos necesarios.
El momento en el que cambia la vida de un jugador es diverso. En estos casos expuestos, el cambio se ha debido al fichaje por un equipo importante o un debut con repercusión en el panorama futbolístico. Es en esos momentos cuando sientes que tu sueños, que todo por lo que has estado luchando está muy cerca. Evidentemente la diferencia entre algunos de estos jugadores es muy grande, pero esto es lo interesante. Poder comparar y ver como cada uno ha ido pudiendo lograr (o no) sus objetivos futbolísticos hasta llegar al ahora. Lo que si se puede decir es que el fútbol siempre deja huella. Seas profesional, amateur o tan solo espectador el fútbol se ha llegado a convertir en algo imprescindible en la sociedad actual.

